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Análisis y Desarrollo Global

G20, vacunas y COVID-19: ¿Por qué es imprescindible el éxito de la iniciativa COVAX?

Serie | COVID-19 y estrategia de respuesta #25

13.11.2020

Este documento forma parte de una serie de notas de debate que abordan preguntas fundamentales sobre la COVID-19 y las estrategias de respuesta. Los trabajos han sido elaborados sobre la base de la mejor información científica disponible y pueden ser actualizados a medida que esta evolucione.

Escrito por Virginia Rodríguez, responsable del proyecto de incidencia política de ISGlobal, este documento pone el foco en COVAX, el pilar de vacunas de la iniciativa ACT Accelerator, nacida al amparo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y uno de los objetivos de la próxima cumbre del G20 en Riad. Explica de qué modo COVAX da respuesta a los desafíos que plantea el acceso universal y equitativo a la inmunización.

COVAX: el pilar para conseguir una vacuna accesible y asequible a nivel global

La comunidad internacional se enfrenta al reto de acelerar el desarrollo de una serie de vacunas eficaces frente a la COVID-19. Varias candidatas se encuentran en fase de ensayo clínico y otras lo estarán próximamente. A la espera de estos resultados, hay otro reto urgente: aumentar la capacidad de producción de dosis de vacunas para, a continuación, garantizar su distribución equitativa. El objetivo de COVAX es garantizar 2.000 millones de dosis de una vacuna eficaz para finales de 2021 que permitan acabar con la fase aguda de la pandemia. Antes de que finalice este año, se tendrán que haber reunido los recursos suficientes para poder financiarlo.

Para responder a estos retos COVAX se articula en dos ejes:

  1. El primero es para financiar la aceleración del desarrollo de vacunas candidatas a través de la Coalición para innovaciones en la preparación ante epidemias (CEPI).
  2. El segundo es la Facilidad COVAX ( COVAX Facility), una plataforma liderada por la Alianza para la vacunación (GAVI por sus siglas en inglés) para la adquisición y distribución equitativa de las vacunas que superen los ensayos. A través de COVAX se garantiza a la industria (que es quien debe producir las vacunas) un volumen de demanda a escala que incentive la adopción inmediata de las medidas necesarias para aumentar su capacidad de producción y comenzar con ella en cuanto se disponga de una vacuna eficaz.

Para agregar la demanda, la Facilidad COVAX diferencia entre grupos de países.

  • Por un lado, los denominados “autofinanciados” tienen la posibilidad de acordar compromisos de compra u opciones de compra del número de dosis que determinen los propios países en unas condiciones iguales para todos ellos ya establecidas.
  • Por otro lado, una serie de países ya identificados de menores ingresos y renta media serían beneficiarios de un Compromiso de Mercado Avanzado ( Advanced Market Committment, AMC por sus siglas en inglés), una herramienta para que países donantes de Ayuda Oficial al Desarrollo aporten recursos que permitan a los países en desarrollo acceder a la vacuna en cuanto empiece a producirse.

Los intereses nacionales y la respuesta multilateral

La iniciativa COVAX se erige como una respuesta multilateral y colaborativa a la pandemia, impulsada desde instancias como la ONU, la OMS, el G20 o la propia Unión Europea. Todo ello en un momento en que el multilateralismo y el equilibrio de poder internacional están en redefinición ante las múltiples crisis desencadenadas por la COVID-19. Algunos actores clave del sistema internacional, como EE. UU. y Rusia, se han desmarcado de esta iniciativa replegándose en mensajes y políticas nacionalistas que concentran esfuerzos y recursos en su propio abastecimiento. China, por su parte, anunció recientemente su adhesión a COVAX.

El caso de la Unión Europea ilustra a la perfección la tensión entre la voluntad de cooperación internacional y el interés, en este caso regional, de asegurar un abastecimiento suficiente para un conjunto de países de una de las regiones más ricas del planeta. Por un lado, es una de las principales impulsoras de COVAX desde su creación; por otro, está negociando con la industria de forma bilateral y centralizada la adquisición de dosis para el conjunto de sus Estados miembros.

América Latina se queda en tierra de nadie

La región latinoamericana ilustra la situación en que se encuentran muchas economías de renta media en la respuesta global a la pandemia. El impacto de la COVID-19 está exacerbando su vulnerabilidad y desigualdades, pero ninguno de los instrumentos diseñados para el acceso universal y equitativo a las vacunas les ofrece una respuesta específica.

La mayoría de los países de la región no son elegibles para el AMC (tan solo Haití, Bolivia, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Dominica, Granada, Guyana, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas). El resto solo pueden optar a una de las dos modalidades de la Facilidad COVAX para países autofinanciados , en las mismas condiciones que los países de mayores recursos.

Como reconoce la Organización Panamericana de la Salud (división regional para las Américas de la OMS), este mecanismo constituye la opción fundamental para acceder lo antes posible a la vacuna para la mayoría de los países de la región, que ha realizado una contribución conjunta a través del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud para el acceso a las vacunas.

¿Qué papel puede desempeñar España en este esquema? Dos recomendaciones.

El gobierno ha reiterado en numerosas ocasiones su voluntad de hacer del multilateralismo, el impulso a la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, la igualdad de género y los derechos humanos los ejes fundamentales de su política exterior. Pocas cosas darían más consistencia a esta vocación que un firme compromiso económico y político con COVAX en un momento como el actual en que España tiene que definir su papel como actor global.

La expresión de este compromiso, más allá de las declaraciones de apoyo a la iniciativa, pasa porque la adquisición de vacunas se lleve a cabo a través de sus instrumentos. Es algo que España debe promover como compromiso comunitario dentro de la UE, llegando a sus propios acuerdos con la Facilidad para el abastecimiento de vacunas.

  1. España debería promover en el seno de la UE la importancia de hacer de la Facilidad COVAX el mecanismo de adquisición global de vacunas por excelencia.
  2. España debería ser ejemplo de este compromiso con COVAX.