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Investigación, Planificación urbana, medio ambiente y salud

El proyecto MOOD COVID evaluará el impacto de la pandemia en la salud mental de las mujeres embarazadas

La investigadora Maria Foraster obtiene una de las diez becas de la convocatoria AXA Research Fund

21.10.2020
Photo by Arteida MjESHTRI
Foto: Arteida MjESHTRI

La incertidumbre generada por la pandemia de COVID-19 y las medidas impuestas contra ella, como el confinamiento o el distanciamiento social, pueden tener repercusiones importantes en la salud mental de la población y, en particular, de las mujeres, que están sufriendo en mayor medida la carga que supone la crisis. El proyecto MOOD COVID tiene por objetivo estudiar el impacto de la pandemia en la salud mental de las mujeres embarazadas, las madres jóvenes y sus hijos .

MOOD COVID, liderado por Maria Foraster, investigadora de ISGlobal, centro impulsado por Fundación ”la Caixa”, es uno de los diez proyectos premiados en la convocatoria AXA Research Fund, a la que se presentaron 500 candidaturas. Se trata de una financiación altamente competitiva, con solo un 2% de tasa de éxito, y que dotará al estudio, que se inició en el mes de abril en el marco del proyecto BiSC , con 240.000 €.

“La pandemia y todo lo que ha conllevado son situaciones que no tienen precedentes cercanos. Necesitamos comprender bien sus efectos sobre la salud mental y el bienestar de las mujeres embarazadas y las madres para poder definir con mayor precisión las medidas en próximas olas o en crisis futuras”, explica Maria Foraster.

MOOD COVID cuenta con la participación de algunas de las voluntarias enroladas en el proyecto BiSC, todas ellas residentes en el área metropolitana de Barcelona. Entre los meses de abril y junio de 2020, en pleno confinamiento, las mujeres respondieron diversos cuestionarios de salud mental y contaron con una línea de comunicación abierta para consultas. Actualmente, el equipo científico evalúa los resultados de la primera fase y prepara un nuevo cuestionario, ya que la intención es realizar un seguimiento tanto de las madres como de sus hijos durante al menos dos años.

“Entre las cuestiones que queremos saber están si los meses de confinamiento se asocian a problemas de salud mental como depresión o estrés postraumático o si es posible que tenga alguna incidencia en el neurodesarrollo de los bebés”, explica Maria Foraster.