Reducir la desigualdad es fundamental para poner fin a la pobreza extrema

A pesar del estado letárgico de la economía mundial, la pobreza extrema sigue disminuyendo en todo el planeta. Con esta nota positiva inició Mario Negre, economista sénior del Banco Mundial, la presentación del informe “La pobreza y la prosperidad compartida”, un acto organizada por ISGlobal y la Obra Social “la Caixa” en CaixaForum Barcelona. Pero advirtió, “si queremos alcanzar el objetivo mundial de poner fin a la pobreza extrema para 2030 será necesario incluir medidas orientadas a reducir el elevado nivel de desigualdad”.

Casi 800 millones de personas subsistieron con menos de 1,90 USD al día en 2013 (el umbral donde se sitúa la pobreza extrema), principalmente en África subsahariana y  Asia meridional. Esta cifra representa alrededor de 100 millones menos de personas extremadamente pobres que en 2012, una disminución que se atribuye en gran medida al crecimiento registrado en China y en la India. Pero aunque históricamente el crecimiento económico ha jugado un papel fundamental en la reducción de la pobreza, las tasas de crecimiento actuales no serán suficientes para alcanzar el objetivo de 2030 y las proyecciones de las tendencias de crecimiento son desalentadoras. Por ello, añadió Negre, “debemos lograr que el crecimiento beneficie a los más pobres, y una de las medidas más eficaces en ese sentido es reducir el elevado nivel de desigualdad”.

Mediante el estudio de un grupo de países que han logrado una reducción significativa de la desigualdad en el curso de los últimos años, entre los cuales se encuentran Brasil, Camboya, Malí, Perú y Tanzanía, los investigadores del Banco Mundial describen en el informe seis estrategias de alto impacto, es decir, seis políticas cuya eficacia para incrementar los ingresos de los pobres, aumentar su acceso a servicios esenciales y mejorar sus perspectivas de desarrollo a largo plazo ha quedado demostrada:

• Desarrollo y nutrición en la primera infancia 
• Cobertura universal de salud
• Acceso universal a educación de calidad
• Transferencias monetarias a familias pobres
• Infraestructura rural, en particular caminos y electrificación
• Tributación progresiva

“Dado que se espera que el crecimiento económico mundial disminuya en los próximos años, es más importante que nunca que los países realicen un esfuerzo conjunto para diseñar políticas y programas que ayuden a avanzar a los sectores de la población menos acomodados”, concluyó el economista del Banco Mundial.

Más información

Informe completo (en inglés)
Post: Asumamos la desigualdad seriamente
Infografía (en inglés)