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Investigación

Actualizando la evidencia sobre fármacos para prevenir la malaria en embarazadas VIH-seropositivas

Una revisión Cochrane liderada por investigadoras de ISGlobal actualiza la evidencia sobre intervenciones para la malaria y el VIH durante el embarazo

07.10.2024
Foto: Murchana Roychoudhury

En una revisión Cochrane publicada recientemente, investigadoras de ISGlobal actualizan la evidencia científica sobre las intervenciones para prevenir la malaria en mujeres embarazadas e infectadas por el VIH. La revisión, realizada con una metodología que pretende minimizar los sesgos y guiar la toma de decisiones, sugiere que la dihidroartemisinina/piperaquina es eficaz, no aumenta el riesgo de transmisión del VIH de la madre al feto, y es bien tolerada.

En el África subsahariana, las infecciones por malaria y VIH suelen darse juntas, lo que supone graves riesgos para las mujeres embarazadas. El VIH no sólo exacerba los síntomas de la malaria, sino que también impide que las mujeres seropositivas tomen los medicamentos recomendados para prevenir la malaria durante el embarazo debido a interacciones entre los medicamentos. “La profilaxis diaria con el antibiótico cotrimoxazol, que previene infecciones oportunistas en personas con VIH, es incompatible con el tratamiento intermitente recomendado con los antimaláricos sulfadoxina-pirimetamina”, señala Raquel González, investigadora de ISGlobal. Esto significa que la prevención de la malaria en mujeres embarazadas seropositivas depende únicamente del cotrimoxazol, dejándolas extremadamente expuestas a la enfermedad.

Una revisión sistemática y un metaanálisis de 14 ensayos clínicos

González y otras personas expertas evaluaron la evidencia disponible sobre la seguridad y eficacia de tratamientos alternativos para prevenir la malaria en embarazadas seropositivas. La revisión sistemática incluyó 14 ensayos clínicos realizados entre 2002 y 2023 en 11 países subsaharianos. En los ensayos participaron un total de 4.976 embarazadas seropositivas que fueron asignadas aleatoriamente para recibir -o no- los diferentes tratamientos probados.

Tras analizar los datos agrupados de los distintos ensayos clínicos, las autoras concluyen que añadir los fármacos mefloquina o dihidroartemisinina/piperaquina al tratamiento diario con cotrimoxazol probablemente reduce el riesgo de infección por malaria en la sangre y la placenta en el momento del parto, y no parece aumentar el riesgo de perder al bebé o que tenga bajo peso al nacer. Sin embargo, el problema de la mefloquina es que puede aumentar el riesgo de que la madre transmita el VIH al bebé, y provoca más efectos secundarios comparado con el cotrimoxazol solo. En cambio, la dihidroartemisinina/piperaquina no parece aumentar el riesgo de transmisión maternoinfantil del VIH y es bien tolerado.

“La evidencia sugiere que la dihidroartemisinina/piperaquina es un fármaco adecuado para prevenir la malaria en embarazadas seropositivas que toman una dosis diaria de cotrimoxazol”, afirma Clara Pons-Duran, primera autora de la revisión.

“Ahora toca evaluar los costes y beneficios de aplicar esta estrategia, así como la posibilidad de que el parásito desarrolle resistencia contra la combinación de fármacos”, señala González. Los autores insisten en la necesidad de realizar estudios en regiones con diferentes intensidades de transmisión de la malaria y estacionalidad para guiar y adaptar las recomendaciones de prevención de la malaria en mujeres con VIH.

Para más información, escuchar este podcast (en inglés) donde Raquel González y Clara Pons explican la relevancia y las conclusiones de la revisión.

Referencia

Pons-Duran C, Wassenaar MJ Yovo KE, Marín-Carballo C, Briand V, González R. Intermittent preventive treatment regimens for malaria in HIV‐positive pregnant women. 2024. Sept 26, doi: 10.1002/14651858.CD006689.pub3